Un ayuntamiento de Lanzarote acusa a Interior de usurpar sus terrenos para acoger inmigrantes ilegales

Lanzarote era una de las islas de las Canarias en la que fuentes consultadas por OKDIARIO pedían que se prestara especial atención “por su incapacidad de absorber a los inmigrantes ilegales que están llegando cada vez en mayor número”. Las consecuencias de esa realidad están llegando ahora que no quedan plazas para acoger a los inmigrantes ilegales y el Ministerio del Interior ha improvisado, otra vez, un campamento cerca de la zona portuaria de Arrecife. Sin embargo, el Ayuntamiento de esta localidad ha decidido enfrentarse a la cartera que dirige Fernando Grande-Marlaska exigiendo que muestre la documentación que le ha permitido instalar unas tiendas de carpas y un vallado en terrenos municipales sin pedir autorización.

Desde hace varios días las plazas de las que dispone Lanzarote para la acogida y atención de población inmigrante que ha llegado ilegalmente a la isla están más que saturadas. Ante esta situación el Ministerio del Interior ha decidido levantar en las inmediaciones de la comisaría de Arrecife unos barracones muy similares a los de Barranco Seco, la infraestructura levantada en Las Palmas durante la crisis migratoria de 2020. Una infraestructura calificada como temporal y que un año después sigue en pie y en funcionamiento.

En el caso de Arrecife el consistorio de la localidad ha decidido enfrentarse abiertamente al Ministerio del Interior no sólo por lo que consideran una usurpación de terreno municipal sino porque el Ayuntamiento está convencido de la inconveniencia del lugar elegido por Interior para acoger dignamente a los inmigrantes ilegales que llegan a Lanzarote.

«Indigno e inseguro»

La alcaldesa de la localidad de Arrecife, Ástrid Pérez, asegura que lo que hay detrás del levantamiento apresurado de un campamento en una zona lindante con la zona portuaria responde a “una falta de previsión y planificación” en lo que a atención de personas inmigrantes se refiere. Según Pérez, los barracones levantados bajo la responsabilidad de Interior son “indignos” y lo que es mucho peor “inseguros”.

El consistorio se muestra tan tajante porque dice disponer de informes de Protección Civil que dejan en muy mal lugar la elección del emplazamiento escogido. Según el citado informe se trataría de una zona “con riesgo de inundación de aguas fecales (…) sin que haya llegado información para la reducción del riesgo”. Pero no es el único riesgo al que apunta el informe tras el que el Ayuntamiento hace sus reclamaciones. Según el documento en cuestión, “en dicho emplazamiento pueden concurrir una gran variedad de riesgos a la vista de las instalaciones de estructuras desmontables que se relacionan en el presente informe. De igual modo, se desconoce si habrá grupos electrógenos o cualquier otra instalación que pueda poner en riesgo la vida e integridad física de las personas, al no tener constancia de que en la referida instalación se haya efectuado una evaluación de los riesgos, plan de seguridad y de evacuación, así como procedimientos de coordinación con el Servicio Local de Protección Civil ante situaciones de emergencias”.

Pero es que las quejas de la alcaldesa de Arrecife no son precisamente nuevas, por lo que se entiende que ya haya decidido pasar a la acción. A principios de agosto la Delegación del Gobierno, representante provincial del Ministerio del Interior, advirtió al ayuntamiento su intención de instalar un puesto temporal de identificación de inmigrantes en esa misma ubicación. Ya entonces la alcaldesa hizo notar el desacuerdo del consistorio, pero Interior hizo oídos sordos.

Meses más tarde ese centro de identificación es ya un centro de acogida, así que Arrecife ha enviado a su policía local a requerir la documentación que acredite que existe autorización para ese uso en concreto. Hasta ahora no ha habido ningún tipo de respuesta. Es por lo anterior por lo que se ha solicitado la documentación al Ministerio y la alcaldesa avisa: sin papeles se ordenará el desmantelamiento inmediato de los barracones.

Las fuentes consultadas por este periódico atribuyen la situación a la falta de atención a la población de inmigrantes ilegales de Lanzarote con respecto a los de las otras islas. El goteo de llegadas a una isla con muchísimos menos recursos y la lentitud de las devoluciones han provocado que la saturación haya llegado antes. Y la cosa irá a peor.

Las últimas estadísticas revelan un aumento de la inmigración ilegal a España de más del 40% con respecto al año pasado. A estas alturas de 2021 son ya 31.000 las personas que han llegado de manera ilegal a nuestro país.  De ellos casi el 95% lo han hecho por mar y un total de 15.000 han llegado a Canarias. Eso son 8.000 personas más que el año pasado, año de la gran crisis migratoria de las pateras en Canarias. El año del muelle de Arguineguín. Desde Arrecife su ayuntamiento espera una respuesta de Interior y si ésta no llega desmantelarán un campamento insalubre e inseguro para los inmigrantes ilegales.